La Metamorfosis, de Franz Kafka

El genio de Praga es el autor de este pequeño e inmenso cuento, clásico de la literatura mundial, necesario e infaltable en tu biblioteca.
Kafka, por Emma Calviño

Kafka, cuadro de Emma Calviño (pintora argentina contemporánea)

Todos podemos ser cucarachas

"Una mañana, tras agitado sueño, Gregorio Samsa amaneció transformado en un insecto".

Esa es la primera oración de "La metamorfosis", un comienzo que es una verdadera bomba, que ya te anticipa que no vas a leer una historia más, en ese pequeño libro hay demasiado. ¿Cómo era eso que nos decían en el colegio? "Un cuento está compuesto por tres partes; introducción, nudo y descenlace". Parece que Kafka no prestó mucha atención en la escuela, al menos, no habrá prestado atención a esa frase que tanto escuchamos los que fuimos al colegio.

Kafka fue un tremendo genio de la literatura, un exponente impresionante que dejó en sus escritos obras fundamentales que marcaron el siglo XX. En "La metamorfosis", de una manera maravillosa, logra hacer sentir al lector qué es lo que le pasa a alguien cuando se transforma en una carga para las personas que conforman su círculo íntimo. Vale aclarar que esta es sólo una interpretación de las muchísimas que se hicieron (y siguen haciendo) de este libro.

Kafka mantuvo una relación durísima con su padre, un hombre fuerte y ganador, que chocaba demasiado con el perfil de Franz. A través de sus novelas, Kafka fue sacando todas las tristezas que su vida le proporcionaba. La metamorfosis no es una excepción, se puede ver en la relación que existe entre Gregorio y su padre.

Aunque no lo hayas leído, seguramente habrás oído hablar de él, tendrás pocas oportunidades de leer una historia tan brillantemente triste. Sin acudir a golpes bajos (como es tan frecuente por estos días) el escritor logra hacer sentir miserias de la vida en sociedad.

Este genio logró crear una inmortal obra maestra, el libro es pequeño pero tiene un contenido inmenso que jamás podrá ser comprendido en su totalidad, a pesar de los innumerables análisis y distintas interpretaciones que se le hicieron. Cuando se termina la lectura, te deja una sensación que no se te borrará por unas buenas horas, realmente merece ser leída más de una vez.

El despertar de Gregorio, convertido en una cucaracha que no puede bajar de su cama, pensando con su cerebro de hombre de un modo tan normal que aterroriza, sin sorprenderse ni preguntarse el por qué de su nuevo estado, mientras a su alrededor poco a poco van tomando conciencia de su metamorfosis el padre, la madre y las dos hermanas, no se sabe si más preocupados porque no fue a trabajar o porque tienen a un mostruo en casa, aporta riquísimos detalles acerca de las miserias y bellezas de la vida humana.

A través de las escasas sesenta páginas del cuento se puede seguir el desarrollo de ese día diferente para Gregorio Samsa, y un rato de serena lectura bastará para que se te mueva toda la estantería y te pongas a pensar en vos mismo.

Me encantaría entrar a comentar más a fondo esta obra maestra, pero sería arruinarles a los que no la leyeron los factores más que increíbles y sorpresivos que tiene. Por este motivo me limitaré a recomendarles fuertemente que la consigan y la lean.

Y, por favor, no sean bestias, no confundan a Kafka con Kaká, el del Milan.

[volver al Sumario] [volver a la página del Maestro]

Para comunicarte con el Maestro Augusto, escribile a: maestroaugusto@lakermese.net.
El Maestro siempre te responde.